Este es la nota que nadie espera escribir, porque
a pesar de la mala experiencia que SM Arica siempre ha tenido en los tribunales
de la ANFP, a pesar que el fallo de la primera sala del tribunal había sido unánime,
y que la manifestación de los hinchas en las afuera de la ANFP tuvo la simpatía
y la empatía de la prensa, abrigábamos la esperanza que esta segunda sala
aplicara justicia deportiva y se reconociera el derecho de Arica de permanecer
en primera B conseguido deportivamente en cancha.
Debí partir este nota con un desagravio a quien
se ha convertido en una víctima más en todo este proceso, y me refiero al
jugador Zederick Daniel Vega Arrieta. Vega no tiene pero ninguna culpa en todo este
desaguisado, y si hoy su nombre tiene muy mala prensa, él no tiene ninguna
responsabilidad de la negligencia de la directiva de Arica con la complicidad
del ente rector el futbol chileno, porque se le ha atormentado injustamente en
la vitrina digital de las redes sociales, publicando su ficha medica, su
contrato y hasta su sueldo. Así de mala leche. Desde aquí y del programa ENTRE
HINCHAS le mandamos un abrazo y toda nuestra solidaridad.
En el programa ENTRE HINCHAS analizamos junto al panel y los comentarios de nuestros seguidores lo que significa para la hinchada este desenlace, análisis que no se puede hacer sin involucrar los sentimientos de rabia y pena. De los cientos de comentarios que se hicieron durante el programa, hay uno que refleja el sentir de muchos y explica la rabia colectiva que hoy siente la hinchada del Bravo, decía “Una cosa es descender por malo y otra es descender por huevón”.
Porque por más que nos sigan diciendo algunos dirigentes
que esto se puede revertir en la justicia ordinaria, y hasta en el TAS; también
nos dijeron estaba todo en regla y no había que preocuparse, y ya saben lo que
paso y donde estamos hoy, descendidos nuevamente en segunda (tercera) y con la
incertidumbre del futuro de nuestro Bravo querido.
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